Es
un servicio que se desempeña desde un centro de control de última
tecnología, donde personal experto vigila edificios en momentos
críticos y generalmente fuera del horario de su actividad de cara al
público. La vigilancia continua permite analizar eventos producidos
durante los periodos de cierre del edificio hasta su apertura,
registrando todos los movimientos que en él se producen.
Respecto
al modus operandi del servicio, un supervisor verifica in-situ los
procedimientos seguidos para determinadas operaciones (carga y descarga
de material, acceso de subcontratas, etc.) y posteriormente aporta al
cliente informes de todas las desviaciones que detecta. Así el cliente
siempre está completamente informado de la operativa seguida y de las
incidencias a corregir.
MEDIOS TÉCNICOS
· Centro de control.
· CCTV.
· Cámaras y sistemas de comunicación.
VENTAJAS
Permite una vigilancia proactiva durante los períodos en los que no hay vigilancia fija.
El cliente siempre está completamente informado del resultado de la operativa.
Análisis de eventos producidos durante los periodos de cierre del inmueble.
APLICACIONES
· Sucursales de una entidad.
· Tiendas distribuidas geográficamente.
· Centros de Salud.
· Locales y centros comerciales.